No pasa un día sin recibir un correo electrónico o mensaje enviado por un creyente profundamente preocupado con un enlace agregado a un video que proclama los peligros que enfrenta el cristianismo en nuestro tiempo. Algunas publicaciones van desde las academicas, con citas de las Escrituras sobre la persecución de los últimos tiempos de la Iglesia y escritas para adaptarlas al estado actual de la sociedad, hasta las profecías rotundamente llenas de falsas enseñanzas vendidas por dudosos predicadores de televisión y los llamados profetas de nuestros tiempos.
Probablemente hayas recibido estos mensajes de amigos y familiares en tu red social, y a veces son muy claros: la embestida contra nuestra fe está llegando y debemos prepararnos para defenderla. Como si la Iglesia global, la Esposa de Cristo fuera a ser defendida por las fortalezas de los seres humanos, o tal vez porque Dios Todopoderoso necesita personas que defiendan Su Iglesia. Que nos quede claro, Jesús dijo: "Edificaré mi iglesia, y las puertas del infierno no prevalecerán contra ella. " (Mateo 16:18 ESV). Su proclamacion fue y continua siendo definitiva y no deja a duda quien está en control: Dios Padre.
Hablando francamente, la mayor amenaza para el cristianismo en el siglo 21 no surge de fuerzas externas,sino que proviene del interior del cuerpo, esto ya esta predicho por las Escrituras “Amados, no crean a todo Espiritu, sino pongan a prueba los espíritus, para ver si son de Dios. Porque muchos falsos profetas han salido por el mundo” (1 de Juan 4:1 RVC).
Casi la mitad de las mas de 200 denominaciones en los Estados Unidos están siendo divididas por uno o varios temas altamente controversiales. El cristianismo estadounidense está en crisis, y refleja el estado caótico de la iglesia antes de la Reforma. Las facciones políticas se han formado en su interior y hasta han moldeado la proclamacion del evangelio para reflejar las inclinaciones personales de sus lideres; el aumento de la corrupción, los escándalos dentro de esta, etc., han debilitado a la Iglesia principalmente desde adentro.
Un cristianismo debilitado no es eficaz y es incapaz de cumplir su Gran Comisión: "Ahora los once discípulos fueron a Galilea, a la montaña a la que Jesús los había dirigido. Y cuando lo vieron, lo adoraron, pero algunos dudaron. Y Jesús vino y les dijo: "Toda autoridad en el cielo y en la tierra me ha sido dada. Por lo tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a observar todo lo que os he mandado. Y he aquí, estoy con ustedes siempre, hasta el fin de los tiempos". (Mateo 28:16-20).
Este escrito no está negando el valor de las profecías bíblicas, mucho menos su importancia para predecir los eventos que ocurrirán en los últimos tiempos como lo predijeron los hombres inspirados por el Espíritu Santo, lo que se está declarando es que no debemos caer en estas ideas extravagantes y a menudo falsas y las llamadas enseñanzas, y nuevas revelaciones que solo distraen a los elegidos y los hacen descuidar su comisión divina: “Porque surgirán falsos cristos y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que, de ser posible, engañarán incluso a los elegidos.” Mateo 24:24 RVC.
El mayor peligro al que se enfrenta la Iglesia es el interés decreciente de los cristianos en leer y estudiar la Biblia por sí mismos como lo hicieron los creyentes de Berea: "Ahora bien, estos judíos eran más nobles que los de Tesalónica; recibieron la palabra con todo entusiasmo, examinando las Escrituras diariamente para ver si estas cosas eran así. " (Hechos 17:11 ESV). Los cristianos estadounidenses,se contentan con asistir a la iglesia, escuchar un sermón e irse a casa o al centro comercial más cercano después de asistir a la asamblea semanal, o reunirse para las comidas dominicales y hablar sobre el gran sermón que escucharon, o lo bien preparado que estaba el orador al presentar el sermón.
En vista de los eventos inquietantes nacionales y globales que debe decirse no han tomado a Dios por sorpresa, en cambio, Él ha orquestado todos los eventos para cumplir Su propósito y planes. Debemos ser humildes en nuestra actitud, sobrios en nuestro pensamiento y disciplinados en nuestro estudio de la Biblia, Su Palabra, y aprender sobre la Historia del Cristianismo a través de los siglos. La Iglesia de Jesucristo, Su Novia no va a ser destruida en el corto plazo, y lo más importante, ni mucho menos por ningún medio humano o incluso por los poderes espirituales del aire. Cierro con este pasaje de las Escrituras para animaros:
"Finalmente, sed fuertes en el Señor y en la fuerza de su poder. Ponte toda la armadura de Dios, para que puedas estar en contra de los planes del diablo.Porque no luchamos contra la carne y la sangre, sino contra los gobernantes, contra las autoridades, contra los poderes cósmicos sobre esta oscuridad presente, contra las fuerzas espirituales del mal en los lugares celestiales. Por lo tanto, toma toda la armadura de Dios, para que puedas resistir en el día malo, y habiendo hecho todo, mantenerte firme.Por lo tanto, ponte de pie, habiendo abrochado el cinturón de la verdad, y habiendo puesto la coraza de la justicia, y como zapatos para tus pies, habiendo puesto la preparación dada por el evangelio de paz. En todas las circunstancias toma el escudo de la fe, con el que puedes extinguir todos los dardos llameantes del maligno; y toma el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios, orando siempre en el Espíritu, con toda oración y súplica. Con ese fin, manténgase alerta con toda perseverancia, haciendo súplicas por todos los santos. " (Efesios 6:10-18 ESV).
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